fbpx
FAMILIA

¿Que Hacer Si Mi Hijo Adolescente No Quiere Venir A La Iglesia?

Comparte este blog:


La verdad que este es el temor que tenemos muchos de nosotros como padres cristianos, el temor a enfrentar esa edad donde ellos deciden por sí mismos si siguen o rechazan la fe que les hemos enseñado por años; somos padres de 3 hijos nacidos y criados en la fe cristiana, nuestro hijo mayor de 20 años, nuestra hija menor de 17 años y mientras escribimos este blog mi segundo hijo está cumpliendo 19 años, él, nuestro segundo muchacho hoy termina su adolescencia y está comenzando su juventud.  

¿Cómo así? 

Hablemos un poco sobre las 5 etapas perfectas diseñadas por Dios camino a la adultez de cada ser humano: de los 0 a los 5 hablamos de la primera infancia, de los 6 a los 10 la niñez, entre los 11 y 12 la pre adolescencia, de los 13 a los 18 la adolescencia, de los 19 a los 25 la juventud, a los 26 ya comienza la adultez en cada individuo. 

 

Para poder responder a la pregunta del título de este blog miremos qué sucede en la pre adolescencia y la adolescencia en el cerebro y en el cuerpo de cada persona, creyente o no creyente. 

 

En la niñez creemos todo lo que los padres nos enseñan, sobre nosotros mismos, sobre el mundo, sobre la fe, la vida, etc., en esa edad papá, mamá e iglesia son y deberían ser la fuente principal de información y formación de cada niño. A medida que crecen, frases como ¡eres el más rápido! ¡Eres la más bonita! ¡Nadie supera tus dibujos! Entre otras tantas, ya no producen el mismo impacto de cuando estaban en la niñez. Es en esa transición de la niñez a la pre adolescencia en donde ocurre algo que es común y muy normal de esa etapa, y es que empieza una metamorfosis, un cambio biológico y se comienza a pensar críticamente sobre sí mismos. Se comienza a ver el mundo de otra forma, ya que se da inicio a la individualidad, a la comparación con sus pares, a pensar que papá y mamá dicen siempre cosas lindas o positivas porque me aman. 

Se dan cuenta de que hay distintas perspectivas de la realidad, que hay otros mejores, más listos, y más rápidos que ellos, y comienzan a salir de esa cápsula que como padres creamos y pensamos ingenuamente que siempre permanecerían allí. En la gran mayoría de veces como padres no estamos preparados para perder a ese niño que ya comienza una etapa nueva de crecimiento y madurez camino a la adultez, en esta etapa el preadolescente comúnmente se pregunta ¿a quién le gusto? Y ¿quién me gusta? No en sentido sensual, sino buscando en donde encajar.

Ahora bien, es en esta etapa entre la pre adolescencia y la adolescencia, esa única y corta etapa de sus vidas donde familia e iglesia deben convertirse en maestros y unir intencionalmente esfuerzos para que se desarrolle esa fe que va mucho, mucho más allá que esos pocos años que pasan muy rápido, es una importante y única etapa de construcción de identidad cristiana.

Pero sigamos adelante y hablemos un poco de lo que ocurre en la adolescencia, aquí es donde cada persona percibe que es única y llegan grandes preguntas como: ¿Quién soy?, ¿A dónde pertenezco?, ¿Qué debería creer y por qué a veces me cuesta hacerlo?, ¿Por qué importo?

Esas precisamente fueron las preguntas que mis hijos se hacían sin decírmelo, pero que con mi esposa percibíamos, normalmente buscan esas respuestas en otras personas que no son sus padres, no se sienta mal por eso ni piense que es un mal padre o madre, o que sus hijos no confían en usted, es normal y sano que quieran escuchar de otros lo que usted por años les ha enseñado. 

Aquí es donde viene la gran importancia de la iglesia en la formación de nuestros hijos en esa etapa de sus vidas. En nuestro caso, esas preguntas las hicieron a sus amigos de la iglesia, fueron personas puestas intencionalmente por mi esposa y por mí en sus vidas que sabíamos que podían dar dirección cristiana a sus vidas, reafirmando lo que se les decía en casa. Procuramos siempre que participaran de los programas para adolescentes que nos ofrecía la iglesia y allí también reafirmaron las bases de su fe.

Parte de la respuesta a “qué hacer si mi hijo adolescente no quiere venir a la iglesia” se encuentra en lo mencionado anteriormente, quería mostrar brevemente cómo funciona la mente de todo preadolescente y adolescente creyente o no, es una etapa que todo ser humano vive, pero sé que quieres saber más… 

Junto con mi esposa hacemos parte de la dirección de Kids y Teens de MCI Bogotá y dirigimos los talleres de padres en nuestra iglesia. Quiero compartir contigo tips que hemos recopilado en el trabajo semana a semana con estos jovencitos, con sus padres preocupados de que sus hijos abandonen la fe, en lo que vivimos y aprendimos con mis hijos y los vagos recuerdos de cuando pasamos por esos años. Son consejos que nos ayudaron mucho en nuestra labor como padres y maestros de pre y de adolescentes:

  • La Oración es irremplazable: haga Declaraciones de lo que la sangre de Jesús hizo por ellos.
  • Libertad para hacer Preguntas: que tengan la libertad de hacerlo exponiendo por qué no quieren ir a la iglesia. Hemos hecho este ejercicio en la iglesia donde les damos a los adolescentes una hoja en la que pueden escribir preguntas anónimas, lo que quieran, sin temor a ser señalados y cuando encuentran respuestas razonables y bíblicas, se afirman más en su fe.
  • Entienda que ellos están en construcción y no pretenda que ellos piensen como nosotros de adultos ya lo hacemos: Enseñe desde la mente del que aprende y no desde la mente del que enseña, hágalo fácil, atractivo. Jesús lo hizo. Lucas 24:45 “entonces les explicó la Biblia con palabras fáciles, para que pudieran entenderla”
  • Aunque están en ese desarrollo de sus creencias, ellos buscan respuestas con sentido a lo que se les dice, en pocas palabras: una fe que piensa. Nunca responda “porque sí”, o “porque yo lo digo y soy su papá”; habrá cosas difíciles o imposibles de responder, ellos ya están desarrollando su capacidad para razonar. Un día uno de mis hijos me preguntó ¿Por qué le pasan cosas malas a la gente buena? No tuve respuesta, pero le dije que una mejor pregunta era ¿Qué pasa en la gente buena cuando les pasan cosas malas? Le leí el salmo 119:71 de la NTV, Y allí comencé un diálogo lógico, bíblico y con sentido con él, mi hijo todavía recuerda esa conversación.
  • Es la etapa donde ellos comienzan a ver su futuro, una buena pregunta que pueden hacerle a sus hijos es: “¿Qué adulto estás construyendo? Vas a vivir más años como adulto que como niño, adolescente y joven juntos”. Créame, ¡funciona! Lo he hecho y los deja pensando, luego les digo que el mejor ejemplo de adultez madura fue Jesús y el mejor lugar para construirse es la iglesia.
  • Haga atractivos los principios que nunca pasan de moda, muestre siempre el resultado de una vida que sigue a Cristo y el resultado de no seguirlo. A veces les digo “hay vidas que son ejemplo y otras que son advertencia… ¿Conoces alguna?”, siempre dicen que sí.
  • Ponga intencionalmente personas que influencien positivamente la vida, el pensamiento y la fe de sus hijos, toda iglesia debería ofrecer líderes entrenados para influenciar las nuevas generaciones, sugiero que, si donde está no encuentra lo anterior, busque una iglesia que tenga un programa de discipulado para preadolescentes y adolescentes.

Oramos y confiamos que esto sea de ayuda para su linda labor de formación y crianza, amamos este trabajo y estamos comprometidos en la formación cristiana de futuras generaciones. 

Con cariño. Roberson Flórez y Marcela González


También te podría interesar

Cómo motivar a nuestros hijos a ser agradecidos

Cómo motivar a nuestros hijos a ser agradecidos

FAMILIA Cómo motivar a nuestros hijos a ser agradecidos Comparte este blog: “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.” Tesalonicenses 5:18   La celebración del día de acción de gracias se ha hecho cada vez...

leer más
El rol de los padres en la educación de los hijos

El rol de los padres en la educación de los hijos

FAMILIA El rol de los padres en la educación de sus hijosComparte este blog: Salmos 127:3-5 «He aquí, herencia de Jehová son los hijos; cosa de estima el fruto del vientre. Como saetas en mano del valiente, así son los hijos habidos en la juventud....

leer más
Cómo orar por mis hijos adolescentes

Cómo orar por mis hijos adolescentes

FAMILIA ¿Cómo orar por mis hijos adolescentes?Comparte este blog: Por: Roberson Flórez y Marcela González Cada etapa que viven nuestros hijos es diferente, en esta edad viven una montaña rusa de emociones - ¡Si me gusta! - ¡ya no me gusta!, está feliz y al...

leer más
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad